Llegas a una ciudad nueva y aunque tienes la guía bajo el brazo y te has leído todo lo que hay en Internet sobre ella, lo cierto es que es la primera vez que pones un pie allí y nada te vendría mejor que tener un amigo que te conduzca por sus calles, no te haga perder el tiempo en atracciones aburridas y sepa qué hacer, dónde y cuándo. Pero aunque no tenemos un amigo en cada puerto, ¿haz oído hablar de los greeters? Greeter es una persona local que se ofrece como guía de turismo gratuito a todos aquellos turistas que quieren conocer su ciudad.

Lo que mueve a esta gente no es el afán del dinero sino el deseo de que su ciudad quede como el mejor de los recuerdos, que las vacaciones de los turistas que la eligen como destino sean las mejores. Muchos de ellos aprovechan para practicar el idioma que estudian, español alemán, francés, ruso, el que sea y existen greeters en Nueva York, en Londres, Buenos Aires y hasta en Australia.

Es cierto que podemos contratar a cualquier guía de turismo en las numerosas agencias que se dedican a eso, ¿pero acaso no es mejor estar con alguien motivado realmente por el amor a su ciudad y el deseo de conocer gente nueva? Estos greeters son gente amable, entusiasta, divertida, sociable, con tiempo libre y mucha energía.

Pueden ser estudiantes, gente joven o jubilados y hay uno para cada tipo de turista: greeters para jóvenes que llegan con ganas de salir de noche y conocer la vida artística y cultural de la ciudad, greeters gente mayor que quiere recorrer museos y pasear por las calles, greeters para gente a la que le gusta el cine o greeters para gente que simplemente quiere la opinión desinteresada de un local.

Hay una organización, una red internacional que nuclea a todos los greeters del mundo: globalgreeternetwork.info. Te dejo algunas ciudades más donde este servicio de guías de turismo gratuitos está disponible: Adelaida, en Australia, Brighton y Kent en Inglaterra, Lyon, Nantes, Marsella, París y Pas de Calais en Francia, Chicago, Houston y Nueva York en Estados Unidos, La Haya en Países Bajos y finalmente Toronto, en Canadá.