No siempre es necesario contar con una gran suma de dinero para realizar un paseo interesante por un destino inusitado. Hay grandes atracciones al alcance de la mano y, lo que es mejor, muchas de ellas son gratuitas.

Además de los parques y algunos museos cuyas entradas son libres encuentro en los mercadillos lugares divertidos y de gran atracción. Para visitarlos no hace falta gastar ni una moneda pues más allá de que siempre es posible comprar artesanías, alimentos o souvenirs lo cierto es que también puede ser una gran excursión antropológica en donde descubrir la cultura y las costumbres locales.

Algunos de estos mercados conservan las tradiciones de hace siglos, es el caso de algunos mercados de la India o Marruecos, mientras que otros encantan con su variedad de productos y su impecable oferta. En la cercanías de Londres los mercados abundan, comenzando con el universo que rodea a Camden Town y siguiendo con Portobello Market o Spitafields, el mercadillo de frutas más grande de Londres.

También está el Mercado del Rialto de Venecia, uno de los sitios obligados para todo aquél turista que desee conocer las maravillas de esta ciudad y otro mercadillo importante es el Marché International de Rungis de París, el mercadillo de alimentos más grande del mundo.

Y si estáis paseando por Europa del Este no podéis dejar de visitar el mercado de Yeliseyevsky, un fabuloso mercadillo de lujo de la ciudad de San Petesburgo.

Lo importante entonces es difrutar del recorrido en una aventura social de lo más barata.