Recuerdo un capítulo de Friends en el que Joey intentaba vestirse con todo lo que tenía en su armario. Una prenda sobre la otra hasta parecer gordo, demasiado quizá. Curiosamente, esta escena ha servido de fuente de inspiración en el caso del equipaje.
Una gran manera para optimizar el espacio en las maletas y que entonces no terminen por transformarse en pequeños motines a manos de los controles de las aerolíneas es llevar puestas la mayor cantidad de prendas posibles, los zapatos más grandes, los más pesados, los abrigos que ocupan mucho lugar o bien que debido a sus materiales pesan unos cuantos gramos. Cualquier idea es viable siempre y cuando estéis dispuestos a pasar un rato de calor agobiante en los aeropuertos, normalmente demasiado climatizados.
Pero el esfuerzo quizá valga la recompensa: las maletas estarán más livianas y así evitaréis pagar costos adicionales por ellas, en especial en el caso de las compañías low cost que tanto disfrutan cuando nos pillan con algunos gramos de más.
Este método no suele fallar pues ninguna compañía impone restricciones a la ropa u objetos que uno lleva encima.
O comentarios en "Maletas de viaje baratas: truquillos para no pagar por el exceso de equipaje (parte III)"
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