¿Existe la manera ideal de hacer la maleta? ¿Hay consejos geniales para empacar? Pues cada uno tiene su propio estilo y depende mucho de qué tipo de maleta lleves pues no es lo mismo empacar en una mochila que una cómoda Samsonite, ¿no es cierto? Hacer la maleta para viajar lejos es un gran desafío. Jamás puedes colocar todo lo que quieres y terminas llevando muy pocas cosas y dudando si son o no las correctas. Veamos más consejos expertos para hacer la maleta con estilo:

• Conoce cuál es tu color: debes saber cuál es el color que mejor te queda y de esa forma eliminas de antemano mucha ropa. La clave está en elegir una clave de color y en base a ella organizar lo que lleves. Los especialistas dicen que el color perfecto es una combinación estratégica de colores neutros, enérgicos y dramáticos basados en el tono de tu piel, del pelo y de los ojos. Así, el color neutral depende del color de tu iris (deberás usarlo para las faldas, zapatos, bolso, pantalones y chaquetas). El color enérgico debe hacerte sentir cómoda, te tiene que gustar llevarlo. Y el color dramático es el que contrasta con el color de tu piel, cabello y ojos.
• La simpleza ante todo: si eres mujer no te zafes llevando mucha bisutería. Opta por el tono que va contigo (plata, dorado o bronce) y elige un kit sencillo. Por otro lado parece que el número ideal de zapatos para empacar es tres: cómodos para viajar, un segundo par para salir y un tercero de emergencias.
• Evita arrugas: es un poco imposible evitarlas pero un buen consejo es rellenar los espacios de la maleta con las medias y la ropa interior para generar una base plana. Un rectángulo de plástico es útil para envolver en él las faldas y sudaderas (quedan como cuando están en las tiendas). Si no llevas plancha de viaje entonces apenas llegues al hotel, abre la ducha de agua caliente y cuelga todo en perchas para que el vapor ayude a planchar.
• Piensa en las fotos: mi madre me enseñó que esto es primordial. Después te miras en la foto y te quieres matar por lo horrible que estás vestido. Debes visualizar como te queda la ropa que llevas y pensar en los sitios que estarás: ¿la playa azul?, ¿las montañas verdes?, ¿el desierto dorado?. Acorde con los colores de los paisajes eliges la ropa, es decir decides qué empacar según el destino de viaje.