Uno de los grandes temas en las vacaciones es elegir el tipo de alojamiento. Y su precio. En mi próximo viaje me alojaré en pisos de alquiler que encontré y pagué por Intert. Lo cierto es que el precio de los hoteles ha subido mucho y no tenía ganas de estar jugando al gato y al ratón buscando ofertas.

Muchos viajeros saben jugar este juego y están alertas. Si eres de ellos, entonces he aquí algunos consejos para saber cuándo es mejor hacer reservas de hotel:

• Es muy probable que las tarifas caigan a medida que tu fecha de viaje se acerque, aunque siempre se corre el riesgo de que no queden habitaciones disponibles. Ahí tienes que saber cuán grande es el hotel, por eso esperar hasta último momento es algo recomendable sólo en hoteles importantes y con muchas habitaciones.
• Debes observar si en la fecha de tu viaje la ciudad es poco o muy turística. Si es muy turística los hoteles compiten entre sí y tienes más chances de dar con ofertas y promociones. Y por supueso, hay mayor disponibilidad. Siempre que no te quedes sin nada esperando la “gran oferta” de último minuto, es un juego que se puede jugar,
• Las ofertas de último minuto son más fáciles de encontrar en temporada baja. Cuando no hay gente la competencia es todavía más feroz así que en Europa, por ejemplo, las mejores tarifas se consiguen entre octubre y abril, sin contar las fiestas y vacaciones.
• Busca los hoteles que ofrecen “cancelación gratuita de reserva”. Usan esto como gancho, así que puedes ir reservando y si consigues una mejor tarifa le puedes dar de baja sin coste. Procura leer con atención cuál es la política del hotel en esta materia.
• Usa el teléfono. Nos hemos acostumbrado mucho al email y a lo online pero el teléfono sigue estando, así que si tienes alguna duda o quieres jugar tus cartas y presionar para conseguir rebajas, el teléfono es la opción. ¿Regatear? Sí, en algunos hoteles pequeños o medianos todavía es posible.