En el mes de diciembre las opciones para conocer el mundo están al alcance de la mano pues la Navidad trae consigo algunos escenarios naturales que en época festiva se vuelven un verdadero espectáculo.

navidad

Es el caso de los muchos mercadillos navideños que cada año regresan a la vida después del largo letargo. Muchos de ellos se encuentran en importantes ciudades como París o Roma mientras que otros incluso son los encargados de dar vida a localidades que de otra forma quedarían en el olvido.

Hay mercados grandes y pequeños, humildes y ostentosos pero todos ellos tienen la ventaja de que invitan a un paseo gratuito en el que no faltará la diversión, con una importante oferta de obsequios, artesanías, adornos y productos gastronómicos.

Sin duda alguna, los platos típicos son uno de los grandes imanes de estos mercados y así es como cada año las personas se acercan a los puestos para degustar esas delicias que sólo se elaboran en esta fecha.

Ciudades como Berlín, Copenhague, Dresden, Cracovia, Munich o Bruselas son famosas por sus mercadillos de navidad, sin embargo hay muchos otros destinos que también se entusiasman con la llegada de Papá Noel y entonces se animan a adornar las calles de sus ciudades de color verde y rojo.