En el pasado quedaron las vacaciones sin móvil. Nadie quiere irse sin su smartphone, pero lo cierto es que los costes del roaming nos aniquilan el bolsillo y muchos terminamos dependiendo del WiFi gratis de tiendas, hoteles o departamentos de alquiler turístico. No es la única opción.

usar-el-movil-en-el-exttranjero

Entre las opciones para utilizar nuestro móvil fuera del país siempre está la posibilidad de contratar un paquete internacional a nuestro operador. Estos paquetes incluyen llamadas, SMS y datos y se pagan como un extra en nuestra cuenta habitual. También podemos usar nuestro móvil lo menos posible aunque hay que saber que los SMS, las llamadas y el tráfico de datos tienen precios elevadísimos sin un paquete.

También está la opción de desconectar el móvil de los datos, avisar a la empresa que vamos a estar afuera y utilizarlo siempre en “moda avión” para conectarlo solo a WiFi. Y por último, una opción interesante que deberíamos tener en cuenta: comprar una tarjeta SIM de un operador local. Si tu móvil no permite el uso de esas tarjetas consigue de algún amigo o del cajón de tus recuerdos un móvil más viejo y listo. Incluso puedes comprar un móvil barato y usarlo exclusivamente para eso. Es la opción más barata para poder viajar usando el móvil.

Una tarjeta SIM te brinda un número de móvil local y crédito para hacer llamadas o usar los datos. Si vas a Francia, por ejemplo, Orange tiene tarjetas SIM por 39 euros y esta tarifa incluye 120 minutos de llamadas en todo Europa, mil mensajes de texto en Europa y 1 GB de datos también en todo el continente a velocidad 3G. Y si lo gastas puedes recargarlo.